30.9.15

Decirte adiós con un te quiero. Silvia C. Carpallo (reseña en castellano)

Clica sobre la bandera per a llegir la versió en català 


Aitana vive en el pueblo con su madre, que ha sufrido una enfermedad y ha precisado que su hija dejara Madrid y la ayudara. Allí lleva una existencia insípida, aburrida y sin un futuro interesante. De repente un hecho dramático e inesperado hará que tenga que volver a Madrid y vuelva a compartir piso con sus amigas de la facultad. Pero ahora las tres han cambiado, cada una ha hecho su vida lejos de las otras y, cuando vuelven a vivir juntas, nada irá como habían pensado.


Silvia C. Carpallo construye una novela que fluye con serenidad y sin estridencias en un momento de la vida de las protagonistas, concretamente durante seis meses. Y dibuja un triángulo donde cada una de ellas forma parte de un todo. El todo es, evidentemente, la amistad que las une, pero, al igual que ocurre en la vida real, cada una de ellas es un universo en sí misma que tiene miedos, anhelos, esperanzas, talentos, secretos y amor para dar y recibir.

Las primeras palabras de la novela te atrapan por su sensibilidad y belleza. La escritora tiene la capacidad de mirar el mundo a través de unos ojos que traducen lo que ven en poesía. Aunque tengo que decir que el lenguaje es actual y nada recargado. Simplemente es un placer leerlo. Es capaz con cuatro palabras de transportarte a un escenario donde tú conoces, y reconoces muchas veces, qué hay ante la protagonista, qué ve, qué piensa, qué siente. Las situaciones más cotidianas invitan a una reflexión profunda que no es ni banal, ni pastel, ni pesada, son pensamientos que, si no hemos tenido nunca, es fácil pensar que muchas otras personas sí han tenido. Y por eso conectamos rápido tanto con los personajes como con la situación que se describe.

Más adelante comienzas a latir al mismo ritmo que las páginas de la novela, pasas de la incertidumbre a la tristeza, de la tristeza a la resignación, de la resignación a la esperanza, de la esperanza a la alegría, de la alegría a la valentía... y tú estás allí, entendiendo las metáforas constantes con las que embellece la historia, porque no son otra cosa que la materialización de la forma especial que tiene la escritora de ver el mundo que nos rodea.

Pero ¿de qué va la novela? Pues del amor, de la madurez personal, de las pérdidas, de la vida real, la que fuera de las páginas de un libro o de la pantalla de la televisión cuesta, es difícil y nos plantea constantemente diferentes caminos para escoger, maneras diferentes de pasar el tiempo que tenemos. "Siempre pensé que enamorarse era algo fácil [...]. Lo que no sabía es que lo difícil en la vida no es enamorarse, sino construir un verdadero amor".

Y llegamos al final, que no es otro que tres comienzos, porque, al igual que la vida que tenemos, las cosas no se acaban sino que siguen y cambian y se rompen y se superan.

Cada capítulo comienza con la referencia y el significado de una flor, que es una manera de adelantarnos lo que encontraremos, y con una protagonista diferente como narradora: Aitana, Delia o Lucía. Aunque la historia es lineal y no vamos atrás, la veremos desde tres puntos de vista distintos, lo que nos dará una dimensión general muy interesante y nos descubrirá que necesitamos la comprensión y el perdón para amar y ser felices.

Esta novela está catalogada como erótica, y tengo que decir que yo no la considero así. Sí que es cierto que hay algunas escenas sexuales explícitas, pero más bien diría de esta novela que es romántica y de una belleza extraordinaria porque nos la muestra en situaciones cotidianas y simples. Estoy convencida de que os encantará. No esperéis más y empezad a leerla.

A Silvia C. Carpallo le ha gustado esta reseña. Pincha aquí para verlo.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada